En este artículo te ofrecemos algunos ejercicios sencillos y consejos naturales que, si los realizas diariamente durante una temporada, te permitirán reducir naturalmente la papada. ¡Descúbrelos!
Movimientos de cuello
Los ejercicios más sencillos, y a la vez los que nos ayudarán también a mejorar posibles dolores de cuello o cervicales, son los siguientes:
Sentada o de pie, lleva la mirada y la cabeza hacia el techo, levantando la barbilla, y cuando estés al límite entonces frunce los labios y mantén la posición durante unos segundos. Notarás como se estira todo el cuello.
Lleva suavemente la cabeza hacia un lado, mantén unos instantes y luego llévala hacia el otro.
Ejercicio con una pelota
Colocaremos una pelota de tenis debajo de la barbilla y la sostendremos apretándola contra el pecho. Iremos haciendo presiones y soltando la fuerza repetidamente. De esta manera conseguiremos hacer fuerza en una zona que solemos tener flácida.
¡Mastica chicle!
Masticar chicle es un curioso y sencillo ejercicio que también nos ayudará a fortalecer toda la musculatura. Podemos acostumbrarnos a hacerlo un par de veces cada día, intentando movilizar bastante la zona y hacerlo incluso abriendo la boca. Lo haremos preferiblemente estando solas y evitaremos que el chicle sea con azúcar, para no contribuir al sobrepeso o a los problemas dentales.
Vigila tu dieta
Si tu papada es una cuestión genética, ya que la tienen también tus padres o abuelos, no debes perder la esperanza. Cuanto antes debes empezar con estos ejercicios y realizarlos con constancia.
La papada está muy relacionada con el sobrepeso. Si ése es tu caso, y sabes que tienes un exceso de grasa en tu cuerpo, te recomendamos que además de estos ejercicios lleves también una alimentación saludable y equilibrada.
No debes prescindir de las grasas, ya que éstas también son fundamentales en nuestra dieta, pero sí debes evitar las que son perjudiciales (fritos, bollería, embutidos, etc.) y elegir las beneficiosas (aceites de primera presión en frío, aguacate, frutos secos, pescado, yema de huevo, etc.).
También debes evitar los cambios bruscos de peso, los cuales afectan por la acumulación de grasa en las zonas que menos deseamos y porque contribuyen a aumentar la flacidez de los tejidos.
Da firmeza a tu cuello
La flacidez es una cuestión fundamental a combatir también para lograr tener una piel firme bajo la barbilla. Los ejercicios nos ayudarán a tonificar esa zona, pero también deberíamos no olvidarnos de hidratarnos siempre el cuello con la misma crema hidratante que usemos para el rostro.
Una vez a la semana también deberíamos realizar una exfoliación con un peeling natural para eliminar el exceso de células muertas y favorecer la renovación de la piel. Podemos preparar peelings caseros con ingredientes que todas tenemos en casa, y así resultarán todavía más naturales y económicos.
Evita los rayos solares excesivos
Finalmente deberemos evitar otra de las causas del empeoramiento de la papada, que es el daño que nos provoca una exposición continuada y abusiva a los rayos solares.
Una exposición exagerada, en horarios de máxima radiación y durante varias horas, provoca una destrucción del colágeno y la elastina, favoreciendo el envejecimiento de la piel y la pérdida de firmeza. Evita siempre las horas del mediodía, usa siempre crema protectora y refréscate continuamente con agua fría. Igualmente podrás lucir un bronceado perfecto pero más saludable.
Fuente: bolsademulher.com
En este artículo te ofrecemos algunos ejercicios sencillos y consejos naturales que, si los realizas diariamente durante una temporada, te permitirán reducir naturalmente la papada. ¡Descúbrelos!.....
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